Ya descubrí el mundo oculto bajo la montaña. Salí de las cavernas y me encaminé a otro nuevo lugar oculto a mi mirada. Velika Planina, la tierra donde los pastores construyeron su reino.

Subido en el telesilla, elevado sobre los árboles, veo las casas de los pastores. Hechas de madera que la nieve ha envejecido hasta volverlas de color gris.

Llego a la cima y camino hasta el poblado donde las vacas pastan y el viento me castiga. Compruebo de primera mano la existencia de una vida ajena a la mía, tal vez extinta, pero palpable. Y yo, aprendiz de la vida, aprecio la dureza de aquella vida y valoro la mía. Me pregunto si debería aportar a mi vida algunas cosas de esta tierra en el cielo. Quizá un poco de aprecio por los valores básicos de la vida. Sin tanto artificio urbano.

VELIKA PLANINA. COMO LLEGAR

En el municipio de Kamnik, a poco más de 50 kms de Liubliana, se encuentra este idílico lugar, accesible desde teleférico y telesilla, o usando alguno de los senderos marcados para llegar a esta altiplanicie, una de las más grandes Eslovenia, y por seguro, la más famosa.

POBLACION

Según las estadísticas oficiales, solo hay 4 habitantes, pero suponemos que con el buen tiempo, aumenta de forma considerable. Pastores de las poblaciones cercanas, suben con el ganado en busca de mejores pastos. De todas formas, no esperéis masificación alguna. Como en casi toda Eslovenia.

Hay dispersas unas 200 cabañas por todo el territorio, pero el poblado principal lo forman 63. Incluyendo un museo etnográfico, y la capilla de Marija Snežna, destruida por los alemanes en la segunda guerra mundial y reconstruida a finales de los 90 por los pastores.

SENDERISMO

Una vez arriba, el paseo es muy agradable, eso sí, id preparados con ropa para la lluvia y viento, ya que el tiempo es muy cambiante. Se puede ascender al pico Gradišče en una caminata nada exigente.

Para llegar desde otros puntos, se pueden seguir estas dos rutas:

GASTRONOMIA Y ALOJAMIENTO

No podéis marcharos de allí sin dejar de probar alguno de sus productos lácteos. Yogures, quesos, requesones, etc. Os lo ofrecerán desde las muchas cabañas donde se venden para poder degustarlos, o en Zeleni Rob, cabaña donde os podéis alojar y también comer.

También es posible alquilar una cabaña y descansar y disfrutar de la tranquilidad del lugar.