Ronda la Vieja
Esta joya de época romana, aunque con orígenes que se remontan mucho más atrás, parece que será salvada en breve. El abandono por las autoridades años y años apunta a que toca a su fin y una fuerte inversión promete recuperar y poner en valor este tesoro escondido en la comarca rondeña.
A unos 20 kms de la propia Ronda, antes de llegar a Setenil de las Bodegas, se encuentra este conjunto arqueólógico de Acinipo. Abierto durante prácticamente todo el año, ofrece al visitante un lugar distinto, rodeado de vistas espectaculares y de un mágnifico teatro romano en buen estado de conservación.
No obstante, el teatro es uno de los más antiguos de la península, alrededor del siglo I d.c. Conserva gran parte de la estructura y un graderio excavado en la propia roca que podía albergar a unas 2.000 personas.
Acinipo vivió los años de máximo esplendor durante los siglos I y IV d.c., bajo el Imperio Romano, pero estuvo poblada mucho antes, como los restos de casas fenicias descubiertas en la entrada, atestiguan.
La ciudad romana
Instalada en una atalaya sin igual, cercano a la costa gaditana, al valle del Guadalquivir, de tierras fértiles y poseedora de una fuente de recursos minerales muy importante, era fácil pensar que era un lugar ideal para un asentamiento. A pesar de su posición privilegiada para su defensa, la ciudad poseyó en todos sus periodos una muralla defensiva.
Aparte del gran teatro romano que posee, en la parte baja de la ciudad podemos encontrar unos baños romanos, los cuales tenían 3 piscinas distintas. Del resto de casas y de cómo estaba estructurada la ciudad se sabe poco, quedando mucho por descubrir aún.
Decadencia
No es muy conocido el porqué de su abandono, pero Arunda (actual Ronda) fue tomando protagonismo sobre Acinipo. Se estima que estuvo poblada hasta el siglo VII, aunque tampoco se tiene del todo claro. Conocida como Ronda la Vieja desde la antigüedad, convivió durante años con la propia Arunda.
Roma y el vino
Como deciamos la zona es muy fértil y los romanos aprovecharon para el cultivo de la vid. Donde hoy día se encuentra la Bodega Morosanto, ya existía en tiempos romanos una villa con un lagar, donde durante los siglos I al VI d.c, se dedicaron a la viticultura. Morosanto es una de las abundantes bodegas que podemos encontrar por la zona y donde desde hace unas decadas se ha vuelto a recuperar la producción de un vino de una calidad excelente.
Todo esto hace a Acinipo, Ronda la Vieja, y sus alrededores una escapada ideal en nuestra visita a la Serranía de Ronda. Historia y tradición, unidas de la mano en un entorno espectacular.
Os dejamos como recomendación una lista de bodegas a visitar en la zona y como no, nuestro consejo de probar alguno de los maravillosos caldos que en estas tierras se elaboran, que no paran de mejorar y de ganar numerosos premios internacionales.
