Los ecos del Lago del Rey
El Königsee o Lago del Rey se encuentra en el parque natural de Bertchesgaden; en Baviera, al sur de Alemania, en la frontera con Austria y muy cerquita de dos espacios de los que ya te hemos hablado aquí; Werfen y Salzburgo, desde donde podrás visitarlo con total facilidad.
La visita comienza en el pueblo de Schönau am Königsee desde donde salen los barquitos que hacen el recorrido por el lago, la forma más cómoda de visitarlo. Hay zonas habilitadas para aparcar. Los barcos hacen algunas paradas durante el recorrido de manera que podéis adaptar vuestra visita a lo que os resulte más interesante; pudiendo acceder a algunos senderos y a visitar la iglesia de S. Bartolomé.
Nuestra elección fue recorrer el Königsee al completo, siguiendo el sendero que te lleva desde la última parada hasta el Lago Obersee, bordeándolo y continuando hasta llegar a la cascada Rötbachwasserfall. Aunque no debes perder de vista la visita a la cúpula de hielo, en nuestro caso, siendo verano, lo descartamos.
Comprobaréis que no todo el mundo realiza el recorrido completo. Según avanzas los turistas se van quedando atrás y los curiosos siguen adelante hasta alcanzar la cascada. El primer hito del paseo en barco es el momento del experimento del eco. El barco se detiene junto a una de las paredes verticales de las montañas, no hay que olvidar que estamos en Los Alpes, donde sucede lo que te contábamos al comienzo de este artículo. Realmente el efecto del eco resulta llamativo porque no se superpone a la melodía que interpreta el capitán del barco, sino que la repetición comienza justo al acabar de tocar y la repite de forma completa y homogénea.
El trayecto continúa y podrás disfrutar de una de las vistas icónicas del lago, la iglesia de San Bartolomé, alguna cascada que mana de la montaña te adelanta lo que vendrá después y así llegas al otro extremo del lago, donde bien podrás volver o seguir el camino. Nosotros seguimos, está claro; somos viajeros curiosos.
Lago Obersee: Un vaso de leche y un baño
El sendero continúa y empiezas a ver carteles que te llevan a pequeñas granjas lecheras en la que tendrás la oportunidad de probar la leche de sus vacas. Bordeamos el lago Obersee, en este punto hay que tener un poco de cuidado porque siendo un sendero sencillo el suelo es un poco traicionero y puedes tener alguna caída o torcedura. En el otro extremo del Obersee hay una cabaña ideal para hacer una parada técnica, tomar un refrigerio, un vaso de leche, por ejemplo y también darte un baño en el lago. Este también puede ser un buen punto final de tu excursión. Pero claro, a lo lejos, puedes ver la cascada y tu curiosidad viajera te dirá: «Tienes que ir».
Cascada Rötbachwasserfall
Así que comenzarás a caminar siguiendo el sendero con la cascada como referencia, con las vacas observándote con la misma curiosidad que guía tus pasos y dejándose acariciar si se tercia. El sendero atraviesa una parte boscosa hasta alcanzar un amplio claro, el circo glaciar que da origen a los lagos y te darás cuenta de que la cascada que te ha llevado hasta allí no es la única, sino que a los lados del sendero fluyen otras que alimentan el arroyo. Sigues adelante, vuelves a internarte en el bosque, casi al pie de la cascada, donde el agua corre con la fuerza que le imprime la gravedad. Tratamos de llegar al pie de la cascada, pero el sendero se volvía escarpado y se perdía, así que dejando a un lado nuestra curiosidad y dándole su lugar a la prudencia decidimos finalizar ahí nuestro camino.
Hicimos el recorrido de vuelta, recreándonos en el bosque, las montañas, los lagos y el entorno. En el trayecto de regreso, de nuevo en nuestro barquito, no hubo melodía ni eco, pero no fue necesario, en nuestro interior sonaba el eco de la belleza del paisaje.
TIPS
PARQUE NATURAL BERCHTESGADEN
Página del parque natural, en el que podrás consultar la visita al lago y a todo el parque natural, que ofrece una gran amplitud de espacios y experiencias que disfrutar.
WEB DE LA EMPRESA OPERADORA DE LOS PASEOS EN BARCO.
En ella podrás reservar tu pasaje