Aracena es un pueblo al norte de la provincia de Huelva, muy recomendable tanto por razones históricas, como por sus espacios naturales y gastronomía. Más allá de los necesarios paseos por las calles del pueblo que te ayudarán a desconectar, vamos a contarte nuestra visión de algunos de sus enclaves.
Castillo
El castillo de Aracena es el origen de la ciudad, desde la cima en la que se encuentra tienes una vista privilegiada de todo el entorno; el pueblo y la dehesa. En su interior encontrarás los restos de viviendas andalusíes, conocerás de primera mano los cambios en el control del castillo y, en consecuencia, de la zona. Musulmanes, portugueses, castellanos; su paso por el castillo es un ejemplo de un mundo cambiante, siendo la fortaleza uno de los puntos de la llamada línea portuguesa que defendía la frontera con el país vecino.
Iglesia Prioral
A la entrada del recinto, justo al pasar los arcos del campanario de entrada, encuentras la iglesia prioral, construida en los siglos XIII al XV,en estilo gótico-mudéjar. Vale la pena echarle un vistazo a los paneles de sebka de su torre. Son un ejemplo de esa mezcla inevitable de la que nos componemos como seres humanos y sociales que somos.
En esta visita compruebas que las vidas se enlazan a lo largo de la historia, se unen y separan, el dominio de lo que somos cambia de manos. Aunque nunca lo hace nuestra esencia que se enriquece con la mezcla. Esas son las sensaciones que fluyen; musulmanes, cristianos, portugueses y cristianos, todos en el mismo espacio.
Grutas de las Maravillas
Esta gruta es uno de los lugares emblemáticos de Aracena y para visitarla no tendrás que recorrer una gran distancia, pues se encuentra en el mismo casco urbano. Durante la visita te adentrarás en el cauce subterráneo del río que ha abastecido el pueblo desde siempre, aunque ahora se suministran de otras fuentes para poder conservarlo.
Ya en el interior, la visita guiada transcurre con el agua a tu lado entre estalagmitas y estalactitas típicas de las formaciones calcáreas, creadas gota a gota durante siglos, consiguiendo figuras que alimentan tu imaginación y construyendo un universo que, con la ayuda de una buena iluminación, realzan la belleza del lugar. Este tipo de espacios te hacen reflexionar acerca de una cualidad de la que el ser humano no anda sobrado: la paciencia, y también sobre la idea de que las cosas bien hechas, duraderas, requieren su tiempo. Cada gota de agua de la Gruta de las Maravillas refuerza esta idea.
El jamón y la dehesa
Otra de las visitas ineludibles en Aracena es el museo del jamón, piedra de toque para empezar a profundizar en algo que todos conocemos: el jamón de Jabugo, que en esta localidad y en toda la sierra de Aracena es un producto de referencia. Esta visita te llevará directamente a la dehesa, lugar en el que se cría el cerdo ibérico, pero que también es algo más, un ejemplo de equilibrio entre el hombre y la naturaleza, de esa sostenibilidad que a día de hoy buscamos en todos los ámbitos. Es un terreno natural adaptado para un mejor aprovechamiento por parte del hombre, pero que, lejos de ser explotado, ha perdurado en el tiempo convirtiéndose en un paisaje característico y que podemos ver en gran parte de España, convirtiéndose en una seña de identidad y, para nosotros, uno de los más bellos que uno tiene la oportunidad de contemplar.
Así que os invitamos a coger el coche y recorrer los pueblos de la sierra de Aracena, en una ruta por carretera que podéis hacer de forma circular visitando pueblos como Cortegana, Almonaster la Real, Alájar, etc… Ruta que también puede hacerse a través de la red de senderos existente y que, bueno, merece que le dediquemos un artículo independiente.
Sí, otra vez el tiempo, inevitable en esta experiencia; al contemplar el paisaje de la dehesa que se ha construido a lo largo de los siglos, al recorrer grutas en las que cada gota ha sumado su granito de arena para crear belleza y también a través de los monumentos que se conservan y que nos enseñan, como, con el paso de los siglos las cosas pueden cambiar, a mejor o a peor, según con los ojos que se mire; seguramente simplemente se convertirán en algo distinto, con toda seguridad lleno de luces y sombras.
Luces y sombras, ambas forman parte de los ingredientes fundamentales de los que se componen todas las cosas; las personas, las ciudades, las calles, los monumentos y la historia. Viajar es el placer de sumergirse en ellas y descubrirlas, porque siempre hay belleza en la luz, siempre hay magia en las sombras. Aracena, en este sentido, está llena de sensaciones por descubrir.
TIPS
Compra de entradas para tus visitas turísticas
En este enlace puedes adquirir las entradas para visitar tanto la Gruta de las Maravillas como el conjunto del Castillo y el Museo del Jamón. También de forma combinada
Alojamiento
FINCA VALBONO: Como decían en la peli de Peter Bogdanovich, Noises off! (1992): Esto es un remanso de paz, ¡lo alquilo! Y sin duda que lo es, eso sí, está a las afueras pero el entorno es una maravilla y vale la pena. Está rodeado de bosque, castaños y senderos que te invitan a pasear; incluso hay un camino la mar de agradable por el que puedes llegar a Aracena, aunque solo para el día porque carece de iluminación. Tienen tanto habitaciones de hotel como casitas para alquilar. Es una muy buena opción para turismo rural.
Dónde Comer
RUSSES GASTROBAR: Hay una diferencia entre los restaurantes donde se come bien y los especialmente buenos. Se trata de algo muy sencillo; cuando pruebas el plato tu paladar te envía un mensaje al cerebro que dice: ¡hum! y que se traduce como: esto está rico de veras. Probablemente no sea el más barato de Aracena, ni el más tradicional, pero sí el que llevará tu sentido del gusto a un estado zen. En cualquier caso, sea cual sea tu elección, la buena comida está garantizada y, sin duda alguna, el buen jamón.
